Imagen: Diario de Avisos
Las Juventudes Socialistas de Canarias denunciamos públicamente las constantes actitudes y expresiones LGTBIfóbicas que proclaman los representantes del Obispado de Tenerife. Exigimos el cese inmediato de los precursores del odio sobre el colectivo LGTBI, así como unas disculpas públicas por parte de la Diócesis.
En el día de ayer conocimos, a través de los medios de comunicación, de proclamas LGTBIfóbicas en el transcurso de una actividad religiosa de la Renovación Carismática Católica en la Iglesia de Guía de Isora, en Tenerife. Unas afirmaciones vertidas durante el desarrollo de “una oración de liberación de influencias maléficas” en el que el cura no solo trató la homosexualidad y la bisexualidad como un pecado, sino que comparó la orientación sexual con cuestiones tan graves la prostitución o la violación.
Lo acontecido denota la falta de sensibilización del sacerdote con la violencia de género y la explotación sexual que padecen las mujeres a manos de los hombres, así como de una evidente falta de respeto a la comunidad LGTBI. Una cuestión que, entendemos, le incapacita si pretende ejercer de “guía espiritual” para cualquier persona. Si bien, es un hecho gravísimo que cualquier representante de una institución como la Iglesia denigre a las personas LGTBI y trate la orientación sexual como una cuestión incapacitante para el desarrollo de una vida plena.
Esta situación se produce como consecuencia de la legitimación de actitudes y discursos LGTBIfóbicos en el seno de la Iglesia en Tenerife, impulsada principalmente por el Obispo, Bernardo Álvarez, quien ya comparó en 2022 la homosexualidad con el alcoholismo, como si de una enfermedad se tratara.
Estas actitudes deben cesar de inmediato y sin miramiento alguno en el seno de la Iglesia, por lo que se debe ejecutar la destitución de Álvarez y del párroco de Guía de Isora. De lo contrario, el silencio se entenderá como una actitud cómplice con el odio y la discriminación de las personas por una razón intrínseca al ser humano: su orientación sexual.
La destitución de los voceros del odio en la Iglesia debe ser el mínimo indispensable para dar ejemplo dentro de una organización que entendemos que está contaminada por el odio y la LGTBIfobia en la isla de Tenerife.
El respeto a la dignidad, libertad e igualdad de todos los seres humanos, sin distinción alguna por su orientación sexual o identidad de género, son derechos humanos inherentes a las personas y que son superiores a la existencia de cualquier religión o creencia.
Canarias es una tierra respetuosa con la diversidad y libre de LGTBIfobia. Por ello exigimos que el Obispado de Tenerife depure responsabilidades y se comprometa al respeto a la diversidad.
Secretaría de Derechos LGTBI, Comunicación y Retorno Joven
Comunicado suscrito por el grupo sectorial de Derechos LGTBI de Juventudes Socialistas de Canarias.